viernes, 31 de mayo de 2013

El tiempo/espacio roto



Y cómo hago para esconder
las ganas de deshacer
el tiempo atado al miedo
que no supiste dar forma
y que en la más oscura noche
juraste lo que ahora te asusta.

lunes, 20 de mayo de 2013

Capítulo XIX



Sombra incesante de versos añejos
que trepa en mi alma como enredadera
y pliega mis sueños de piedra y cartón
se cierne en lo ocuro de mis pensamientos
y acecha a sus presas desde aquel rincón.

Concilio de necios, arreglo de tontos,
y yo en la poltrona como mediador
de disputas sin dueño, de antaño
caricias que hoy saben a alcohol
destilado en promesas sucias de amor.

No tropiezo en el camino, soy la piedra.
En la refriega el batallón,
en desánimo el cansancio breve
de quien sufre sin razón
y muere descansado.

Amigo de las farolas que llevan
a ningún lugar, que alumbran
caminos que nadie nunca
llegará a pisar. Que tus brazos
apagados no se abrirán nunca más.

Corteza de la rabia contenida
teme al leñador y no al incendio,
quema la savia con las frases
que le sobran en los recuerdos,
que alimentan al fuego eterno.

Y la tormenta lo apacigua,
el agua acaba con sus dudas,
mira sus ramas y están rotas,
su corteza descosida.
Comienza la nueva vida.