martes, 23 de abril de 2013

Mi secreto



Es en frías noches de soledad como ésta en las que me doy cuenta de la importancia de la escritura.
Una marea de voces blancas y apagadas se agolpan en la mente, atosigan a tu cordura y te arrebatan el sueño. Voces blancas y apagadas que susurran pensamientos que rara vez se materializan en frases con sentido.
Están malditas. Están malditas y lo saben. Buscan despojarse de su carga y del vacío en el que se encuentran. Admito ser el precursor de su litigio, el soplo de viento que aviva la llama de su desesperación, y por ello cargo con el pesar de su condena.
Orgulloso reo de la codicia por ser letra, escrito, hoja, poema, libro. Vida.
Y en las noches como esta en las que el viento porta soledad y la pasea por las ciudades, me dejo acompañar por el recuerdo que nunca tuve, por la inocencia de un futuro roto y desmembrado.

Es ahí donde escondo la poesía.